martes, 16 de mayo de 2017

Paco Rabanne, también humilla a los hombres.


De forma sutil en principio. De una manera quizás poco reconocible, pero cuando una mujer en su papel de diosa -por lo menos- puede entrar a su libre albedrío en los lugares más intimo que un hombre pueda disfrutar, reaccionando ellos con verguenza, sintiéndose cohibidos, sin capacidad de reacción ni defensa ante esa irrupción en tal lugar, a eso podemos calificarlo simple y llanamente de humillante.

No hay comentarios:

Publicar un comentario